1 de mayo de 2013

Final



Te digo adiós, y acaso te quiero todavía.
Quizá no he de olvidarte, pero te digo adiós.
No sé si me quisiste... No sé si te quería...
O tal vez nos quisimos demasiado los dos.

Este cariño triste, y apasionado, y loco,
me lo sembré en el alma para quererte a ti.
No sé si te amé mucho... no sé si te amé poco;
pero sí sé que nunca volveré a amar así.

Me queda tu sonrisa dormida en mi recuerdo,
y el corazón me dice que no te olvidaré;
pero, al quedarme solo, sabiendo que te pierdo,
tal vez empiezo a amarte como jamás te amé.

Te digo adiós, y acaso, con esta despedida,
mi más hermoso sueño muere dentro de mí...
Pero te digo adiós, para toda la vida,
aunque toda la vida siga pensando en ti.


José Ángel Buesa



Este blog lo abrí alguna vez en medio de mil problemas emocionales que tenia, lo llene de mis sentimientos, lo atiborre de mil cosas que viví, de todo lo que sentía por una persona, lo  llene de todo lo que él me hizo sentir, de los mil problemas que tuvimos, y de las mil cosas chingonas que también tuve con él.

De este espacio saque a personas geniales, personas excepcionales, que por fortuna he conocido más allá de una pantalla, me dio tanto momentos muy alegres como nostalgias, y por fortuna a esas personas las voy a seguir conservando, los voy a llevar dentro de mi corazón. 

Realmente me pesa decir que esta será la ultima entrada que publique aquí, quizás en mi locura y arrebatos me indigne y decida regresar, pero eso no me llevara a nada, sé que no es bueno fijarse en detalles, pero sé también que hay algunas personas que lo leen y que no me gusta que lo lean, que no me gusta que se enteren de mi vida, y sé que no debería importante, que es mi espacio y etc, pero la verdad es que estoy cansada de eso, de muchas cosas, y considero que lo más saludable es decir adiós. 

Que poner un punto final es lo mejor.

Y ese punto final viene con otros aspectos de mi vida, para bien o para mal.

Es como que de pronto dices "ya estuvo suave de tanta pendejada", no me siento conforme con muchas decisiones que he tomado, con muchas acciones que he tenido, no me siento cómoda con muchas cosas que he hecho desde hace un año, no me siento del todo orgullosa de lo que he hecho desde el primero de enero del 2012, y tampoco me arrepiento, he aprendido mucho. Mucho mas de lo que yo creí que iba a aprender.

En un año logre aprender de la vida mucho más de lo que en todo el camino que llevaba recorrido, he cambiado tanto que a veces me miro en el espejo y no reconozco a quien era antes, y eso esta bien, una vez un amigo me dijo "cambia, modificate, evoluciona, pero no pierdas la esencia", no la he perdido, 

Tengo mas raspones en mis rodillas, y mas cicatrices de las que supuse alguna vez tener, y eso esta bien, aprender y madurar todos los días, me siento orgullosa de quien soy, a pesar de tener algunos aspectos que en realidad me desagradan, pero sé quien soy, de pronto lo sé y eso me hace feliz.

Digo adiós a las personas que quise, a las personas que me enseñaron de algún u otro modo, la vida es eso, un proceso, decisiones,  preferencias, actitudes, y pues, yo decido que camino recorrer, como por ejemplo que acabo de decidir que voy a hacer mi vida en Tijuana definitivamente, que mi camino va para largo todavía. 

Carajo!

Que complicado es decir adiós.

Nunca he sido buena con las despedidas, nunca lo he sido, ni con enfrentar las realidades, siempre terminan callendome en la cara a pesar de conocerlas con anticipación. 

Lo bueno es hacerlo como dice La Maga, que cuando tomas una decisión con la cabeza fría  adquiere una visión impactante, y es cuando dices "punto", hay que hacer el cierre, aunque te duela, aunque te cueste, aunque a veces quisieras caer en el peligrosisimo juego de los "hubiera", de los "quizás", para bien o para mal diría Arjona, total que de esto no te mueres. Y no lo digo por el adiós al blog, lo digo mas bien por el adiós a ciertas situaciones que me han hecho daño.

Siempre me he manejado con la bandera de ser congruente conmigo antes que con nadie, y cuando algo ya me esta afectando más allá de lo que puedo manejar, es el momento en que debo decir "alto". Y me duele decirle alto a esa persona, aun sin que él lo sepa, en este momento en el que nos estamos llevando tan bien, tan jodidamente bien. 

No se puede mover el mundo con un dedo, no se puede tapar el sol con un dedo tampoco. 

Y creo estoy lista para emprender una marcha complicada, un camino que no había transitado antes, pero esta bien, me siento conforme con ello, es lo que quería, es lo que quiero. 

"Eso esta bien, ya tengo mis problemas, para perder el tiempo en otros temas".

Gracias.

A los que están, a los que estuvieron, a los que se quedaron y a quienes me siguen enseñando. 

Adiu.